El comienzo de la temporada de la Fórmula 1 siempre genera incertidumbre y las escuderías están expectantes por los desempeños de sus principales pilotos. Y lógicamente Mercedes era uno de los equipos con más atención después de la partida de Lewis Hamilton. Pero el buen comienzo de George Russell calmó las tensiones por saber qué sucedería después del campeón británico. Ello empujó a los máximos responsables de la escudería a comenzar con las negociaciones para ofrecerle una renovación millonaria a Russell.
El piloto principal de Mercedes ocupa la cuarta posición del campeonato de pilotos tras las cuatro primeras pruebas, a sólo 14 puntos del líder, Lando Norris. Russell acumula tres podios en cuatro grandes premios, incluyendo un segundo puesto en Bahréin. Este arranque fortaleció su posición en las negociaciones con Mercedes, ya que el equipo busca asegurarle un nuevo contrato. Según algunos medios especializados se espera que Russell firme una extensión de dos años con opción para 2028 y que el acuerdo sería de unos 30 millones de dólares por temporada.
El director del equipo Mercedes, Toto Wolff, ya había deslizado en 2024 que pretendía que Russell compartiera lugar, en un futuro, con Max Verstappen, pero esa postura, según aseguran algunos en los paddocks, habría cambiado. Explican que Wolff está satisfecho con la formación actual del equipo, ya que Russell sigue obteniendo resultados sólidos y el novato Andrea Kimi Antonelli se está adaptando a la Fórmula 1.
Desde la salida de Hamilton, Russell asumió el rol de líder del equipo Mercedes y si bien la idea original de Wolff era seguir con el británico como segundo piloto, ahora se prepara para reflejar esa posición en el nuevo contrato, que además costaría significativamente menos que cualquier posible traspaso de Verstappen a Mercedes.
Incluso, Wolff dejó en claro que Russell sigue siendo una prioridad, enfatizando: “No coqueteo fuera si estoy en una buena relación. Así que en este momento, eso [acercarse a Verstappen] no está en ningún radar”.
Las señales positivas de Russell en Bahréin terminaron por convencer a todos. Tuvo una partida impecable al dejar atrás a Charles Leclerc, se mantuvo siempre a tiro del líder, Oscar Piastri y pudo soportar todos los ataques de Norris sobre el cierre de la competencia.
Y no fue sencillo hacerlo, porque el coche de Russell experimentó fallos electrónicos intermitentes, comenzando con una pérdida de datos en las pantallas de cronometraje. Después: a partir de la vuelta 46, el británico se vio afectado por una falla en el sistema de frenos y le informó a su equipo que la fuerza necesaria sobre el pedal cambiaba constantemente, lo que dificultaba mantener una frenada constante y aumentaba el riesgo de bloqueos. El problema lo obligó a ajustar su conducción vuelta a vuelta, especialmente en las fuertes frenadas de la parte final de la carrera. A pesar de las complicaciones, logró defenderse de Norris y asegurar el segundo puesto al llegar a la meta.
Si se firma la renovación, con casi total seguridad, Mercedes le cerraría sus puertas a corto y medio plazo a Verstappen, cuya relación con Red Bull no pasa por su mejor momento. Incluso, cuando para incorporar a Max, existiría la vía de ceder a Andrea Kimi Antonelli a un equipo de menos nivel, aunque con esta cifra millonaria que Wolff le daría a Russell todas estas gestiones parecen algo poco probable.
El comienzo de la temporada de la Fórmula 1 siempre genera incertidumbre y las escuderías están expectantes por los desempeños de sus principales pilotos. Y lógicamente Mercedes era uno de los equipos con más atención después de la partida de Lewis Hamilton. Pero el buen comienzo de George Russell calmó las tensiones por saber qué sucedería después del campeón británico. Ello empujó a los máximos responsables de la escudería a comenzar con las negociaciones para ofrecerle una renovación millonaria a Russell.
El piloto principal de Mercedes ocupa la cuarta posición del campeonato de pilotos tras las cuatro primeras pruebas, a sólo 14 puntos del líder, Lando Norris. Russell acumula tres podios en cuatro grandes premios, incluyendo un segundo puesto en Bahréin. Este arranque fortaleció su posición en las negociaciones con Mercedes, ya que el equipo busca asegurarle un nuevo contrato. Según algunos medios especializados se espera que Russell firme una extensión de dos años con opción para 2028 y que el acuerdo sería de unos 30 millones de dólares por temporada.
El director del equipo Mercedes, Toto Wolff, ya había deslizado en 2024 que pretendía que Russell compartiera lugar, en un futuro, con Max Verstappen, pero esa postura, según aseguran algunos en los paddocks, habría cambiado. Explican que Wolff está satisfecho con la formación actual del equipo, ya que Russell sigue obteniendo resultados sólidos y el novato Andrea Kimi Antonelli se está adaptando a la Fórmula 1.
Desde la salida de Hamilton, Russell asumió el rol de líder del equipo Mercedes y si bien la idea original de Wolff era seguir con el británico como segundo piloto, ahora se prepara para reflejar esa posición en el nuevo contrato, que además costaría significativamente menos que cualquier posible traspaso de Verstappen a Mercedes.
Incluso, Wolff dejó en claro que Russell sigue siendo una prioridad, enfatizando: “No coqueteo fuera si estoy en una buena relación. Así que en este momento, eso [acercarse a Verstappen] no está en ningún radar”.
Las señales positivas de Russell en Bahréin terminaron por convencer a todos. Tuvo una partida impecable al dejar atrás a Charles Leclerc, se mantuvo siempre a tiro del líder, Oscar Piastri y pudo soportar todos los ataques de Norris sobre el cierre de la competencia.
Y no fue sencillo hacerlo, porque el coche de Russell experimentó fallos electrónicos intermitentes, comenzando con una pérdida de datos en las pantallas de cronometraje. Después: a partir de la vuelta 46, el británico se vio afectado por una falla en el sistema de frenos y le informó a su equipo que la fuerza necesaria sobre el pedal cambiaba constantemente, lo que dificultaba mantener una frenada constante y aumentaba el riesgo de bloqueos. El problema lo obligó a ajustar su conducción vuelta a vuelta, especialmente en las fuertes frenadas de la parte final de la carrera. A pesar de las complicaciones, logró defenderse de Norris y asegurar el segundo puesto al llegar a la meta.
Si se firma la renovación, con casi total seguridad, Mercedes le cerraría sus puertas a corto y medio plazo a Verstappen, cuya relación con Red Bull no pasa por su mejor momento. Incluso, cuando para incorporar a Max, existiría la vía de ceder a Andrea Kimi Antonelli a un equipo de menos nivel, aunque con esta cifra millonaria que Wolff le daría a Russell todas estas gestiones parecen algo poco probable.
La intención de Toto Wolff es blindar a su piloto Read More