El pasado lunes al mediodía, alrededor de las 12.20, Jennifer Aniston se llevó un gran susto cuando un hombre atravesó en auto el portón de entrada de su vivienda, situada en la exclusiva zona de Bel Air, en Los Ángeles. Tras dar aviso a la policía, fue detenido antes de que entrara en la casa de la actriz por ser sospechoso de robo. Sin embargo, horas después se conoció que en realidad era un acosador que la perseguía desde hace más de dos años. Ayer, después de comparecer en el juzgado, se le pidió una evaluación mental para poder determinar si es competente para enfrentar los cargos de los que se le acusan, un delito grave de acoso y otro de vandalismo.
A man crashed his vehicle through the gates of actress Jennifer Aniston’s Los Angeles home on Monday, police sources confirmed to ABC News. The “Friends” star was home at the time, police sources said. https://t.co/vjXNFA1laP pic.twitter.com/9EyAerWMgv
— Good Morning America (@GMA) May 6, 2025
El hombre, llamado Jimmy Wayne Carwyle, de 48 años, apareció en la sala acompañado de su abogada, Toral Malik, y dando muestras visibles de tener problemas de salud mental. Acudió enrollado en lo que parecía un acolchado, que solo dejaba ver la parte superior de su cuerpo, desnudo. Estuvo sentado en una pequeña sala contigua a la principal y separada por un cristal, y se levantó para acercarse al mismo y tocarlo. Además, se declaró no culpable.
Carwyle, originario del estado de Misisipi, no pronunció palabra alguna durante la visita, como recoge el medio The New York Post. El juez encargado del caso, Keith L. Schwartz, dudó de si Carwyle entendería a uno de los fiscales, que le exigió permanecer en prisión y no acercarse de nuevo a la actriz. Malik, su abogada, respondió con cierta retranca: “No creo que mantenerle lejos de Aniston sea un problema en este momento”. Finalmente, el juez reafirmó: “No debe tener ningún contacto con Jennifer Aniston, bajo ninguna condición”. En cualquier caso, todo procedimiento quedó suspendido en espera de su evaluación mental.
La Fiscalía aseguró que el hombre lleva persiguiendo a la actriz desde marzo de 2023, con una interminable sucesión de mensajes en redes sociales, correos electrónicos y mensajes de voz. Incluso, hizo distintas publicaciones en las redes sociales sobre ella, a quien denomina como su esposa.
El último episodio se produjo el lunes, cuando llegó hasta la puerta de la casa de la protagonista de Friends con su viejo Chrysler. Tras chocar contra el portón de entrada y atravesarlo, un guardia de seguridad logró pararlo y avisó a la policía, que finalmente lo detuvo. Él no opuso resistencia. En principio, las autoridades pensaron que se trataba de un robo, hasta que conocieron la historia.
Según explicó la policía, la actriz estaba en su hogar al momento del hecho: “Había un guardia de seguridad en el lugar que logró detener al sospechoso hasta la llegada de los agentes, momento en el que lo arrestaron sin incidentes. El residente se encontraba en la casa en ese momento”. Solo el propio atacante sufrió pequeñas heridas sin gravedad. Tras su detención, la Fiscalía aseguró que había causado “daños sustanciales” en la propiedad, una casa que Aniston tiene desde 2012. La fianza quedó fijada en 150.000 dólares.
En un comunicado, el fiscal general de Los Ángeles, Nathan Hochman, afirmó: “El acoso es un delito que puede escalar rápidamente hasta llegar a acciones peligrosas y violentas, amenazando la seguridad de las víctimas y de nuestras comunidades”. Y añadió: “Mi oficina se compromete a perseguir agresivamente a quienes acechan y aterrorizan a otros, garantizando que cumplan con la ley”.
La próxima audiencia contra Carwyle tendrá lugar en dos semanas, el 22 de mayo, en una corte especializada en salud mental. A sus delitos de acoso y vandalismo se le podría añadir un agravante, el de amenazas graves de daños personales, lo que puede hacer que enfrente hasta tres años de cárcel. No se prevé que Aniston esté presente en la próxima presentación en la Justicia, al igual que este jueves, donde únicamente acudió uno de sus abogados, que declinó responder preguntas.
El pasado lunes al mediodía, alrededor de las 12.20, Jennifer Aniston se llevó un gran susto cuando un hombre atravesó en auto el portón de entrada de su vivienda, situada en la exclusiva zona de Bel Air, en Los Ángeles. Tras dar aviso a la policía, fue detenido antes de que entrara en la casa de la actriz por ser sospechoso de robo. Sin embargo, horas después se conoció que en realidad era un acosador que la perseguía desde hace más de dos años. Ayer, después de comparecer en el juzgado, se le pidió una evaluación mental para poder determinar si es competente para enfrentar los cargos de los que se le acusan, un delito grave de acoso y otro de vandalismo.
A man crashed his vehicle through the gates of actress Jennifer Aniston’s Los Angeles home on Monday, police sources confirmed to ABC News. The “Friends” star was home at the time, police sources said. https://t.co/vjXNFA1laP pic.twitter.com/9EyAerWMgv
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El hombre, llamado Jimmy Wayne Carwyle, de 48 años, apareció en la sala acompañado de su abogada, Toral Malik, y dando muestras visibles de tener problemas de salud mental. Acudió enrollado en lo que parecía un acolchado, que solo dejaba ver la parte superior de su cuerpo, desnudo. Estuvo sentado en una pequeña sala contigua a la principal y separada por un cristal, y se levantó para acercarse al mismo y tocarlo. Además, se declaró no culpable.
Carwyle, originario del estado de Misisipi, no pronunció palabra alguna durante la visita, como recoge el medio The New York Post. El juez encargado del caso, Keith L. Schwartz, dudó de si Carwyle entendería a uno de los fiscales, que le exigió permanecer en prisión y no acercarse de nuevo a la actriz. Malik, su abogada, respondió con cierta retranca: “No creo que mantenerle lejos de Aniston sea un problema en este momento”. Finalmente, el juez reafirmó: “No debe tener ningún contacto con Jennifer Aniston, bajo ninguna condición”. En cualquier caso, todo procedimiento quedó suspendido en espera de su evaluación mental.
La Fiscalía aseguró que el hombre lleva persiguiendo a la actriz desde marzo de 2023, con una interminable sucesión de mensajes en redes sociales, correos electrónicos y mensajes de voz. Incluso, hizo distintas publicaciones en las redes sociales sobre ella, a quien denomina como su esposa.
El último episodio se produjo el lunes, cuando llegó hasta la puerta de la casa de la protagonista de Friends con su viejo Chrysler. Tras chocar contra el portón de entrada y atravesarlo, un guardia de seguridad logró pararlo y avisó a la policía, que finalmente lo detuvo. Él no opuso resistencia. En principio, las autoridades pensaron que se trataba de un robo, hasta que conocieron la historia.
Según explicó la policía, la actriz estaba en su hogar al momento del hecho: “Había un guardia de seguridad en el lugar que logró detener al sospechoso hasta la llegada de los agentes, momento en el que lo arrestaron sin incidentes. El residente se encontraba en la casa en ese momento”. Solo el propio atacante sufrió pequeñas heridas sin gravedad. Tras su detención, la Fiscalía aseguró que había causado “daños sustanciales” en la propiedad, una casa que Aniston tiene desde 2012. La fianza quedó fijada en 150.000 dólares.
En un comunicado, el fiscal general de Los Ángeles, Nathan Hochman, afirmó: “El acoso es un delito que puede escalar rápidamente hasta llegar a acciones peligrosas y violentas, amenazando la seguridad de las víctimas y de nuestras comunidades”. Y añadió: “Mi oficina se compromete a perseguir agresivamente a quienes acechan y aterrorizan a otros, garantizando que cumplan con la ley”.
La próxima audiencia contra Carwyle tendrá lugar en dos semanas, el 22 de mayo, en una corte especializada en salud mental. A sus delitos de acoso y vandalismo se le podría añadir un agravante, el de amenazas graves de daños personales, lo que puede hacer que enfrente hasta tres años de cárcel. No se prevé que Aniston esté presente en la próxima presentación en la Justicia, al igual que este jueves, donde únicamente acudió uno de sus abogados, que declinó responder preguntas.
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