La sal, condimento básico en la cocina, permite realzar los sabores de los alimentos e incluso conservarlos. Sin embargo, los expertos relacionan su consumo excesivo con problemas de salud como la hipertensión arterial. ¿Es posible sustituirla? La respuesta es sí. Hay una planta que ofrece los mismos beneficios culinarios que la sal.
Puede resultar difícil eliminar la sal en nuestras recetas, especialmente cuando estamos acostumbrados al sabor. Sin embargo, existen alternativas saludables, como las hierbas y especias, que permiten mantener el sazón en los guisados.
Una de esas alternativas es el ajo; estrechamente relacionado con la cebolla. Se trata de una planta se utiliza desde la antigüedad dentro de la medicina tradicional y la cocina. Como sustituto de la sal, aporta un toque picante y aromático, al mismo tiempo que intensifica el sabor de los alimentos.
Al respecto, el sitio especializado Healthline señala que es posible integrarlo a salsas de tomate, adobos y sopas, sin perder sabor. Aunque no es su única ventaja.
Tal como lo indica un artículo del sitio Medical News Today, el ajo contiene propiedades antibióticas. Al ser picado o triturado, libera alicina, compuesto que ayuda a combatir infecciones bacterianas. También contribuye a reducir el colesterol “malo” (LDL), lo que favorece la salud cardiovascular.
Otros beneficios del ajo son:
Reduce la presión arterial.Protege contra el daño hepático provocado por el etanol (presente en bebidas alcohólicas).Apoya al control del peso, gracias a su bajo contenido calórico.Previene enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer por su alto contenido en antioxidantes.Mejora la salud ósea al reducir el estrés oxidativo.
La sal, condimento básico en la cocina, permite realzar los sabores de los alimentos e incluso conservarlos. Sin embargo, los expertos relacionan su consumo excesivo con problemas de salud como la hipertensión arterial. ¿Es posible sustituirla? La respuesta es sí. Hay una planta que ofrece los mismos beneficios culinarios que la sal.
Puede resultar difícil eliminar la sal en nuestras recetas, especialmente cuando estamos acostumbrados al sabor. Sin embargo, existen alternativas saludables, como las hierbas y especias, que permiten mantener el sazón en los guisados.
Una de esas alternativas es el ajo; estrechamente relacionado con la cebolla. Se trata de una planta se utiliza desde la antigüedad dentro de la medicina tradicional y la cocina. Como sustituto de la sal, aporta un toque picante y aromático, al mismo tiempo que intensifica el sabor de los alimentos.
Al respecto, el sitio especializado Healthline señala que es posible integrarlo a salsas de tomate, adobos y sopas, sin perder sabor. Aunque no es su única ventaja.
Tal como lo indica un artículo del sitio Medical News Today, el ajo contiene propiedades antibióticas. Al ser picado o triturado, libera alicina, compuesto que ayuda a combatir infecciones bacterianas. También contribuye a reducir el colesterol “malo” (LDL), lo que favorece la salud cardiovascular.
Otros beneficios del ajo son:
Reduce la presión arterial.Protege contra el daño hepático provocado por el etanol (presente en bebidas alcohólicas).Apoya al control del peso, gracias a su bajo contenido calórico.Previene enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer por su alto contenido en antioxidantes.Mejora la salud ósea al reducir el estrés oxidativo. Existen alternativas saludables para eliminar la sal de nuestras recetas; las hierbas y especias permiten mantener el sazón en los platos Read More