Dylan, un joven venezolano de 20 años que estudia una secundaria en el Bronx, fue detenido por agentes de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), tras presentarse a una cita en la corte de Nueva York. Asistió sin abogado, convencido de que se trataba de un trámite rutinario relacionado con su solicitud de asilo. Pero al salir de la sala, los oficiales lo detuvieron.
La huida de Venezuela, el secuestro en México y su nueva vida en EE.UU.
Dylan llegó a Estados Unidos en abril de 2024. Viajó solo, ya que su madre, Raiza, y sus dos hermanos pequeños dejaron Venezuela un año antes. La mujer le contó a Chalkbeat que no pudo costear los cuatro viajes juntos, por lo que su hijo mayor debió esperar para emigrar.
Su viaje fue traumático, dijo. En México fue secuestrado por el Cartel de Sinaloa y liberado tras el pago de un rescate. El joven ingresó a Estados Unidos con una cita programada por la aplicación CBP One, que fue revocada por Donald Trump apenas asumió su segundo mandato. Luego, se reunió con su madre y sus dos hermanos en Nueva York y comenzó a construir su futuro.
Aunque ya había finalizado la secundaria en Venezuela, se inscribió en la escuela preparatoria ELLIS, orientada a jóvenes inmigrantes, porque planeaba realizar una carrera universitaria. Solicitó asilo y tramitó el Estatus Especial de Inmigración para Menores (SIEJ), lo que le permitió obtener permiso de trabajo y de conducir. Así comenzó a trabajar como repartidor. “Lo único que quiere es estudiar”, afirmó Raiza.
La cita en la corte y un error que terminó en su detención
El día de la audiencia, el 21 de mayo, Dylan y su madre acudieron al tribunal de inmigración del bajo Manhattan. El joven tenía una cita, que pensaron que se trataba de un simple trámite. Sin embargo, todo salió mal.
Los abogados del gobierno le solicitaron al juez que desestimara el proceso de deportación contra Dylan. El problema fue que también se desestimó su solicitud de asilo y quedó sin protección legal. Como no tenía un abogado, su madre había intentado sin éxito conseguir uno, no tuvo forma de oponerse.
Raiza recordó que, al salir de la sala, dos hombres los siguieron por el pasillo. “Cuando salimos del ascensor, nos dijeron: ‘Apóyense en la pared’”, relató. Los agentes de ICE los esposaron a los dos, pero luego la liberaron y se llevaron a Dylan en un auto sin identificación.
Desde su arresto, Dylan fue trasladado a centros de detención en cuatro estados: Nueva Jersey, Texas, Luisiana y Pensilvania. Su abogado informó a Chalkbeat que pese a tener graves problemas estomacales, no recibió atención médica y permanece esposado de manos y pies la mayor parte del tiempo.
Ahora enfrenta un proceso de deportación acelerada. Su representante legal cree que pueden cuestionar la legalidad de la detención del joven y del proceso de expulsión. Sin embargo, su madre no es tan optimista. Teme que sea enviado a Venezuela, donde ya no tiene familiares cercanos y le preocupa que, en caso de regresar a su país natal, sea encarcelado por el gobierno. “No quiero perder a mi hijo”, se lamentó.
Dylan, un joven venezolano de 20 años que estudia una secundaria en el Bronx, fue detenido por agentes de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), tras presentarse a una cita en la corte de Nueva York. Asistió sin abogado, convencido de que se trataba de un trámite rutinario relacionado con su solicitud de asilo. Pero al salir de la sala, los oficiales lo detuvieron.
La huida de Venezuela, el secuestro en México y su nueva vida en EE.UU.
Dylan llegó a Estados Unidos en abril de 2024. Viajó solo, ya que su madre, Raiza, y sus dos hermanos pequeños dejaron Venezuela un año antes. La mujer le contó a Chalkbeat que no pudo costear los cuatro viajes juntos, por lo que su hijo mayor debió esperar para emigrar.
Su viaje fue traumático, dijo. En México fue secuestrado por el Cartel de Sinaloa y liberado tras el pago de un rescate. El joven ingresó a Estados Unidos con una cita programada por la aplicación CBP One, que fue revocada por Donald Trump apenas asumió su segundo mandato. Luego, se reunió con su madre y sus dos hermanos en Nueva York y comenzó a construir su futuro.
Aunque ya había finalizado la secundaria en Venezuela, se inscribió en la escuela preparatoria ELLIS, orientada a jóvenes inmigrantes, porque planeaba realizar una carrera universitaria. Solicitó asilo y tramitó el Estatus Especial de Inmigración para Menores (SIEJ), lo que le permitió obtener permiso de trabajo y de conducir. Así comenzó a trabajar como repartidor. “Lo único que quiere es estudiar”, afirmó Raiza.
La cita en la corte y un error que terminó en su detención
El día de la audiencia, el 21 de mayo, Dylan y su madre acudieron al tribunal de inmigración del bajo Manhattan. El joven tenía una cita, que pensaron que se trataba de un simple trámite. Sin embargo, todo salió mal.
Los abogados del gobierno le solicitaron al juez que desestimara el proceso de deportación contra Dylan. El problema fue que también se desestimó su solicitud de asilo y quedó sin protección legal. Como no tenía un abogado, su madre había intentado sin éxito conseguir uno, no tuvo forma de oponerse.
Raiza recordó que, al salir de la sala, dos hombres los siguieron por el pasillo. “Cuando salimos del ascensor, nos dijeron: ‘Apóyense en la pared’”, relató. Los agentes de ICE los esposaron a los dos, pero luego la liberaron y se llevaron a Dylan en un auto sin identificación.
Desde su arresto, Dylan fue trasladado a centros de detención en cuatro estados: Nueva Jersey, Texas, Luisiana y Pensilvania. Su abogado informó a Chalkbeat que pese a tener graves problemas estomacales, no recibió atención médica y permanece esposado de manos y pies la mayor parte del tiempo.
Ahora enfrenta un proceso de deportación acelerada. Su representante legal cree que pueden cuestionar la legalidad de la detención del joven y del proceso de expulsión. Sin embargo, su madre no es tan optimista. Teme que sea enviado a Venezuela, donde ya no tiene familiares cercanos y le preocupa que, en caso de regresar a su país natal, sea encarcelado por el gobierno. “No quiero perder a mi hijo”, se lamentó.
Un migrante venezolano fue arrestado por ICE tras asistir sin abogado a una audiencia en Nueva York; un fallo procesal le hizo perder su estatus de protección y enfrenta posible deportación. Read More