Hay fecha y escenario, pero para llegar a la final del 29 de noviembre en el estadio Monumental, de Lima, los 16 equipos que sueñan con la conquista de la Copa Libertadores siguieron el lunes con expectativa el sorteo de los octavos de final, que se desarrolló en Luque, sede de la Conmebol. En dos copones, la distribución de los clubes que se clasificaron en el primer y segundo casillero en la tabla de posiciones de cada uno de los grupos; con cada bolilla extraída, los múltiples deseos, rezos y proyecciones de aquellos que sueñan con la Gloria Eterna. River, Racing, Vélez y Estudiantes fue el póquer de representantes argentinos que por diferentes caminos pretenderán abrir la puerta para disputar la gran final, que repetirá por primera vez anfitrión, desde que en 2019 se instrumentó una definición de un único juego en campo neutral. Con el Mundial de Clubes como eje de atracción del planeta fútbol entre el 14 de junio y el 13 de julio, un mes después del cierre del torneo que se jugará en los Estados Unidos, la Copa Libertadores pondrá en marcha las series de mata-mata, un ida y vuelta en el que para el que pierde no hay mañana y quien se mantiene de pie se esperanza con el éxito.
Argentina, con cuatro equipos, es el país que más clubes clasificó en el primer puesto de los ocho grupos, pero no es la Asociación que tendrá mayor cantidad de representantes en los octavos de final. Ese privilegio es de Brasil, que sumó seis clubes: tres dieron el salto como punteros y los restantes al finalizar en la segunda posición. No es una casualidad: son quienes tienen más cupos, pero también los que ostentan más títulos: 25, divididos entre ocho equipos, los argentinos; 23, pero entre 12 clubes, los brasileros, que se adueñaron de las últimas seis coronaciones. También es propiedad de quienes juran bajo el escudo de la verdeamarela la primera final entre dos representantes de un mismo país: en 2005, San Pablo derrotó a Atlético Paranaense. En los octavos de final, argentinos y brasileros expresarán el 62,5 por ciento de los clasificados, aunque el sorteo solo ofreció un emparejamiento: Vélez vs. Fortaleza.
El último club argentino que se consagró campeón fue River, que en 2018 superó a Boca en la definición en Madrid. Los millonarios tuvieron a tiro el trofeo en el siguiente año, pero en un parpadeo Flamengo, con dos goles de Gabigol, en un minuto, le arrebató el festejo en Lima. El equipo que conduce Marcelo Gallardo es uno de los tres invictos que tiene el actual recorrido; los dos restantes son brasileros: Palmeiras ganó los seis encuentros y es el único que logró puntaje ideal; San Pablo se impuso en cuatro juegos e igualó en los otros dos y es el segundo participante que sumó más puntos, detrás del Verdao.
Emparejado con Libertad, de Paraguay, River primero se enfocará en el Mundial de Clubes –comparte grupo con Urawa Reds (Japón), Monterrey (México) e Inter (Italia)- y después analizará al rival paraguayo, que tiene en Oscar Tacuara Cardozo y Roque Santa Cruz a dos artilleros históricos; los Gumarelos se coronaron campeones del torneo Apertura y el legado del DT Daniel Garnero lo continuó Sergio Aquino, otro argentino –nació en Clorinda-, aunque su recorrido futbolístico es guaraní, donde vistió la camiseta de Libertad, Olimpia y Cerro Porteño. Con River, y con Gallardo, tiene un precedente: en 2014, con la camiseta del Gumarelo, se midió con los millonarios en los 8avos de final de la Copa Sudamericana, que resultó el primer título del Muñeco como DT en Núñez. El partido en Asunción tuvo un hecho curioso: los paraguayos se imponían 1-0 y disponían de un penal, cuando un corte de energía eléctrica provocó un apagón. Al reanudarse, Hernán Rodrigo López falló y River revirtió el marcador con goles de Carlos Sánchez, Sebastián Driussi y Giovani Simeone. Un rival amigable, aunque de superar la serie en el horizonte asomaría Palmeiras, que se cruzará con Universitario (Perú), segundo de River en el grupo.
De los equipos argentinos, Racing es el que más puntos cosechó: 13. El año pasado, la Academia levantó la Copa Sudamericana y rompió con el hechizo de 36 temporadas sin un festejo internacional. El rival será un histórico de la Libertadores: Peñarol, vencedor cinco veces del trofeo. Los uruguayos en 2024 también cortaron varias rachas negativas en la Copa Libertadores: ganaron como visitantes después de seis años y por primera vez en las últimas 13 temporadas superaron la etapa de grupos; la ilusión se terminó con Botafogo en las semifinales. El DT Diego Aguirre, un ídolo carbonero, mantuvo la base del plantel del año pasado y los dirigentes desembolsaron 7.000.000 de dólares a Toluca por Leo Fernández, que se lo asoció en el mercado de pases con River; Héctor Villalva y Eric Remedi, dos criollos en el grupo. En la Liberadores de 1997, Racing derrotó en definición por penales a Peñarol y logró el pasaje a las semifinales.
Enredado, después de quedar eliminado el fin de semana de la Copa Argentina y de caer en los 8avos de final del torneo Apertura, el sorteo resultó una caricia para Estudiantes: el Pincha se medirá con Cerro Porteño, el equipo que menos puntos sumó entre los segundos. Dirigido por Diego Martínez, los argentinos se amontonan en el Ciclón del Barrio Obrero: Jonatan Torres, Federico Carrizo, Matias Pérez, Alexis Martín Arias, Sergio Araujo, Abel Luciatti y Guillermo Benítez; otros conocidos del medio son Bruno Valdez, Alan Soñora, Juan Iturbe y Cecilio Domínguez. Igualmente, el Pincha no resolvió si Eduardo Domínguez seguirá al frente del plantel: la floja campaña, el descontento por los refuerzos después del aporte de Foster Gillett y algunos chisporroteos internos apurarían la salida. El 10 de junio, la fecha límite que el entrenador fijó para conocer su futuro; el contrato vence el 31 de diciembre.
Un ejemplo de los altibajos que desandan los clubes argentinos es Vélez: campeón de la Liga Profesional en 2024, finalista de la Copa Argentina y del Trofeo de Campeones, el nuevo ciclo descubrió al Fortín sin rumbo en el torneo Apertura –no se clasificó para los playoffs- y ganador de su grupo en la Copa Libertadores, primer puesto que selló en Montevideo ante Peñarol. “Espero que lleguen los refuerzos para el 10 de junio”, apuntó Guillermo Barros Schelotto, que tomó las riendas en medio de la crisis y no contará con el juvenil Álvaro Montoro, que se marchará a Botafogo; Christian Ordoñez continuará su carrera en Parma y Valentín Gómez negocia su salida rumbo a Betis. ¿El rival? Fortaleza, segundo de Racing, dirigido por Juan Pablo Vojvoda tiene en sus filas a Tomás Pochettino, Eros Mancuso, Emanuel Martínez, Juan Martín Lucero, Gastón Ávila y Emanuel Brítez; Guillermo Pol Fernández, que se incorporó en enero podría dejar el club.
La Copa Sudamericana, con Central Córdoba
Cinco equipos argentinos se abrazan a la ilusión de la Copa Sudamericana, aunque solo uno conoce rival. Central Córdoba, de Santiago del Estero, realizó una espectacular campaña en la Copa Libertadores, logró un histórico triunfo sobre Flamengo en el Maracaná, cosechó 11 puntos, pero finalizó en el tercer puesto -por diferencia de goles-, por detrás de Liga de Quito y de los brasileros.
Bajó, como todos los que terminaron en el 3er casillero de la Libertadores, a jugar los 16avos de final de la Sudamericana, donde se medirá con Cerro Largo (Uruguay); de superar la llave, el siguiente rival será Lanús, ganador del Grupo G, por encima de Vasco da Gama (Brasil), Melgar (Perú) y Puerto Cabello (Venezuela).
También primeros en sus grupos, los restantes tres clubes argentinos que esperarán adversario son: Independiente, que jugará con el ganador de Universidad de Chile y Guaraní (Paraguay); Huracán, ante el vencedor de San Antonio Bulo Bulo (Bolivia) y Once Caldas (Colombia), y Godoy Cruz ante quien se imponga entre Atlético Mineiro (Brasil) vs. Atlético Bucaramanga (Colombia).
Hay fecha y escenario, pero para llegar a la final del 29 de noviembre en el estadio Monumental, de Lima, los 16 equipos que sueñan con la conquista de la Copa Libertadores siguieron el lunes con expectativa el sorteo de los octavos de final, que se desarrolló en Luque, sede de la Conmebol. En dos copones, la distribución de los clubes que se clasificaron en el primer y segundo casillero en la tabla de posiciones de cada uno de los grupos; con cada bolilla extraída, los múltiples deseos, rezos y proyecciones de aquellos que sueñan con la Gloria Eterna. River, Racing, Vélez y Estudiantes fue el póquer de representantes argentinos que por diferentes caminos pretenderán abrir la puerta para disputar la gran final, que repetirá por primera vez anfitrión, desde que en 2019 se instrumentó una definición de un único juego en campo neutral. Con el Mundial de Clubes como eje de atracción del planeta fútbol entre el 14 de junio y el 13 de julio, un mes después del cierre del torneo que se jugará en los Estados Unidos, la Copa Libertadores pondrá en marcha las series de mata-mata, un ida y vuelta en el que para el que pierde no hay mañana y quien se mantiene de pie se esperanza con el éxito.
Argentina, con cuatro equipos, es el país que más clubes clasificó en el primer puesto de los ocho grupos, pero no es la Asociación que tendrá mayor cantidad de representantes en los octavos de final. Ese privilegio es de Brasil, que sumó seis clubes: tres dieron el salto como punteros y los restantes al finalizar en la segunda posición. No es una casualidad: son quienes tienen más cupos, pero también los que ostentan más títulos: 25, divididos entre ocho equipos, los argentinos; 23, pero entre 12 clubes, los brasileros, que se adueñaron de las últimas seis coronaciones. También es propiedad de quienes juran bajo el escudo de la verdeamarela la primera final entre dos representantes de un mismo país: en 2005, San Pablo derrotó a Atlético Paranaense. En los octavos de final, argentinos y brasileros expresarán el 62,5 por ciento de los clasificados, aunque el sorteo solo ofreció un emparejamiento: Vélez vs. Fortaleza.
El último club argentino que se consagró campeón fue River, que en 2018 superó a Boca en la definición en Madrid. Los millonarios tuvieron a tiro el trofeo en el siguiente año, pero en un parpadeo Flamengo, con dos goles de Gabigol, en un minuto, le arrebató el festejo en Lima. El equipo que conduce Marcelo Gallardo es uno de los tres invictos que tiene el actual recorrido; los dos restantes son brasileros: Palmeiras ganó los seis encuentros y es el único que logró puntaje ideal; San Pablo se impuso en cuatro juegos e igualó en los otros dos y es el segundo participante que sumó más puntos, detrás del Verdao.
Emparejado con Libertad, de Paraguay, River primero se enfocará en el Mundial de Clubes –comparte grupo con Urawa Reds (Japón), Monterrey (México) e Inter (Italia)- y después analizará al rival paraguayo, que tiene en Oscar Tacuara Cardozo y Roque Santa Cruz a dos artilleros históricos; los Gumarelos se coronaron campeones del torneo Apertura y el legado del DT Daniel Garnero lo continuó Sergio Aquino, otro argentino –nació en Clorinda-, aunque su recorrido futbolístico es guaraní, donde vistió la camiseta de Libertad, Olimpia y Cerro Porteño. Con River, y con Gallardo, tiene un precedente: en 2014, con la camiseta del Gumarelo, se midió con los millonarios en los 8avos de final de la Copa Sudamericana, que resultó el primer título del Muñeco como DT en Núñez. El partido en Asunción tuvo un hecho curioso: los paraguayos se imponían 1-0 y disponían de un penal, cuando un corte de energía eléctrica provocó un apagón. Al reanudarse, Hernán Rodrigo López falló y River revirtió el marcador con goles de Carlos Sánchez, Sebastián Driussi y Giovani Simeone. Un rival amigable, aunque de superar la serie en el horizonte asomaría Palmeiras, que se cruzará con Universitario (Perú), segundo de River en el grupo.
De los equipos argentinos, Racing es el que más puntos cosechó: 13. El año pasado, la Academia levantó la Copa Sudamericana y rompió con el hechizo de 36 temporadas sin un festejo internacional. El rival será un histórico de la Libertadores: Peñarol, vencedor cinco veces del trofeo. Los uruguayos en 2024 también cortaron varias rachas negativas en la Copa Libertadores: ganaron como visitantes después de seis años y por primera vez en las últimas 13 temporadas superaron la etapa de grupos; la ilusión se terminó con Botafogo en las semifinales. El DT Diego Aguirre, un ídolo carbonero, mantuvo la base del plantel del año pasado y los dirigentes desembolsaron 7.000.000 de dólares a Toluca por Leo Fernández, que se lo asoció en el mercado de pases con River; Héctor Villalva y Eric Remedi, dos criollos en el grupo. En la Liberadores de 1997, Racing derrotó en definición por penales a Peñarol y logró el pasaje a las semifinales.
Enredado, después de quedar eliminado el fin de semana de la Copa Argentina y de caer en los 8avos de final del torneo Apertura, el sorteo resultó una caricia para Estudiantes: el Pincha se medirá con Cerro Porteño, el equipo que menos puntos sumó entre los segundos. Dirigido por Diego Martínez, los argentinos se amontonan en el Ciclón del Barrio Obrero: Jonatan Torres, Federico Carrizo, Matias Pérez, Alexis Martín Arias, Sergio Araujo, Abel Luciatti y Guillermo Benítez; otros conocidos del medio son Bruno Valdez, Alan Soñora, Juan Iturbe y Cecilio Domínguez. Igualmente, el Pincha no resolvió si Eduardo Domínguez seguirá al frente del plantel: la floja campaña, el descontento por los refuerzos después del aporte de Foster Gillett y algunos chisporroteos internos apurarían la salida. El 10 de junio, la fecha límite que el entrenador fijó para conocer su futuro; el contrato vence el 31 de diciembre.
Un ejemplo de los altibajos que desandan los clubes argentinos es Vélez: campeón de la Liga Profesional en 2024, finalista de la Copa Argentina y del Trofeo de Campeones, el nuevo ciclo descubrió al Fortín sin rumbo en el torneo Apertura –no se clasificó para los playoffs- y ganador de su grupo en la Copa Libertadores, primer puesto que selló en Montevideo ante Peñarol. “Espero que lleguen los refuerzos para el 10 de junio”, apuntó Guillermo Barros Schelotto, que tomó las riendas en medio de la crisis y no contará con el juvenil Álvaro Montoro, que se marchará a Botafogo; Christian Ordoñez continuará su carrera en Parma y Valentín Gómez negocia su salida rumbo a Betis. ¿El rival? Fortaleza, segundo de Racing, dirigido por Juan Pablo Vojvoda tiene en sus filas a Tomás Pochettino, Eros Mancuso, Emanuel Martínez, Juan Martín Lucero, Gastón Ávila y Emanuel Brítez; Guillermo Pol Fernández, que se incorporó en enero podría dejar el club.
La Copa Sudamericana, con Central Córdoba
Cinco equipos argentinos se abrazan a la ilusión de la Copa Sudamericana, aunque solo uno conoce rival. Central Córdoba, de Santiago del Estero, realizó una espectacular campaña en la Copa Libertadores, logró un histórico triunfo sobre Flamengo en el Maracaná, cosechó 11 puntos, pero finalizó en el tercer puesto -por diferencia de goles-, por detrás de Liga de Quito y de los brasileros.
Bajó, como todos los que terminaron en el 3er casillero de la Libertadores, a jugar los 16avos de final de la Sudamericana, donde se medirá con Cerro Largo (Uruguay); de superar la llave, el siguiente rival será Lanús, ganador del Grupo G, por encima de Vasco da Gama (Brasil), Melgar (Perú) y Puerto Cabello (Venezuela).
También primeros en sus grupos, los restantes tres clubes argentinos que esperarán adversario son: Independiente, que jugará con el ganador de Universidad de Chile y Guaraní (Paraguay); Huracán, ante el vencedor de San Antonio Bulo Bulo (Bolivia) y Once Caldas (Colombia), y Godoy Cruz ante quien se imponga entre Atlético Mineiro (Brasil) vs. Atlético Bucaramanga (Colombia).
River, Racing, Vélez y Estudiantes ya tienen rivales; esperan Independiente, Lanús, Huracán y Godoy Cruz, y Central Córdoba, en un playoff Read More