Detienen y procesan a la madre de un futbolista por liderar una red de facturas truchas

La contadora Natalia Foresio, madre del joven futbolista de Gimnasia y Esgrima La Plata Juan Cortazzo, fue detenida y procesada con prisión preventiva por ser considerada jefa de una asociación ilícita, partícipe necesaria de la intermediación financiera no autorizada y coautora de lavado de activos.

Así lo informaron a LA NACION fuentes judiciales y allegados a la defensa de Foresio. Además, en una resolución de 153 páginas, el juez federal de La Plata Ernesto Kreplak también trabó un embargo sobre los bienes de Foresio hasta cubrir la suma de $50.000 millones.

Hubo otros tres sospechosos procesados, entre ellos el esposo de Foresio, identificado por fuentes judiciales como Luis Cortazzo, pero sin prisión preventiva.

La investigación comenzó tras una denuncia presentada en mayo de 2024 por la Dirección General Impositiva (DGI), dependiente de Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), donde se alertaba sobre la detección de “un esquema de facturación apócrifa para el aprovechamiento potencial de usuarios que artificialmente disminuirían las bases imponibles tanto del impuesto a las ganancias como del impuesto al valor agregado (IVA)”.

Según la denuncia, las empresas involucradas “no tendrían la capacidad económica y financiera necesaria acorde con la facturación emitida y recibida”.

Tras un año de investigación, el juez Kreplak ordenó 17 allanamientos en la ciudad de Buenos Aires, en la provincia de Buenos Aires y en Córdoba. En los procedimientos, que estuvieron a cargo de la Gendarmería Nacional y de personal de ARCA, se secuestraron $199.492.700, US$357.153, 1.090.180 pesos uruguayos, 13.070 euros, 5171 reales y 3100 libras esterlinas, dos vehículos, 16 teléfonos celulares, 15 notebooks, un servidor, dos tablets, 12 dispositivos de almacenamiento, tres armas de fuego y 34 municiones de diferentes calibres.

A la contadora se le imputó “ser miembro de una asociación ilícita destinada a cometer delitos indeterminados, en calidad de jefa y organizadora, que habría funcionado de manera permanente, al menos desde el 2020 a la fecha” y también se le “endilgó su participación en la organización y gestión de un esquema de contribuyentes que funcionan como usinas de facturación apócrifa, con la cual se llevaron adelante los siguientes ilícitos: evasión fiscal agravada, la intermediación financiera no autorizada por más de $40.000.000.000, y lavado de activos.

Según el expediente judicial, Foresio, de 48 años, “emitió comprobantes apócrifos con el fin de generar créditos fiscales en cabeza de los contribuyentes (personas físicas y jurídicas) que gestiona para respaldar la emisión de facturas electrónicas con el fin de no generar saldos a pagar en el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y en el Impuesto a las Ganancias y, a la par, emitió notas de crédito apócrifas, y así burló los mecanismos de detección automática de ARCA, con el propósito de ampliar el rango de crédito fiscal tomado por cada usina a los fines de cubrir las posteriores facturas que esa usina iba a proveer a terceros usuarios”.

La contadora se negó a declarar cuando fue indagada por Kreplak. Ayer, al entender que existen los riesgos procesales de entorpecimiento de la investigación y de fuga, el magistrado rechazó el pedido de arresto domiciliario hecho por la defensa de Foresio.

“Se ha constatado que los imputados utilizaron el dinero obtenido de las maniobras ilícitas, no solo insertándolo en el mercado formal con apariencia de licitud, sino también se obtuvo que han adquirido bienes a título personal”, afirmó el juez Kreplak en la resolución donde procesó a la contadora y a los otros sospechosos.

Según pudo saber LA NACION, Foresio, asesorada por sus nuevos abogados, Alfredo Gascón y Miguel Molina, prepara una ampliación de su declaración indagatoria.

“Mi clienta siempre estuvo apegada a su rol de contadora tanto para la creación de sociedades como para el asesoramiento impositivo. El giro delictivo que le quieran dar otros a su intervención no tiene nada que ver con una participación en las presuntas defraudaciones”, sostuvo Molina.

Y agregó: “Foresio jamás realizó dolosamente facturación apócrifa. No contaba con elementos de detección para conocer los extremos de un intercambio de bienes o servicios de un cliente ni el monto facturado. Para los contadores prima el llamado principio de confianza que rige en la vida en sociedad. Pero si así no lo fuera, tampoco un contador cuenta con las herramientas para desarrollar esa investigación”.

El hijo mayor de la contadora detenida juega en Gimnasia y Esgrima La Plata. Tiene 19 años. Debutó en el primer equipo en julio del año pasado y tiene contrato hasta 2027.

La contadora Natalia Foresio, madre del joven futbolista de Gimnasia y Esgrima La Plata Juan Cortazzo, fue detenida y procesada con prisión preventiva por ser considerada jefa de una asociación ilícita, partícipe necesaria de la intermediación financiera no autorizada y coautora de lavado de activos.

Así lo informaron a LA NACION fuentes judiciales y allegados a la defensa de Foresio. Además, en una resolución de 153 páginas, el juez federal de La Plata Ernesto Kreplak también trabó un embargo sobre los bienes de Foresio hasta cubrir la suma de $50.000 millones.

Hubo otros tres sospechosos procesados, entre ellos el esposo de Foresio, identificado por fuentes judiciales como Luis Cortazzo, pero sin prisión preventiva.

La investigación comenzó tras una denuncia presentada en mayo de 2024 por la Dirección General Impositiva (DGI), dependiente de Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), donde se alertaba sobre la detección de “un esquema de facturación apócrifa para el aprovechamiento potencial de usuarios que artificialmente disminuirían las bases imponibles tanto del impuesto a las ganancias como del impuesto al valor agregado (IVA)”.

Según la denuncia, las empresas involucradas “no tendrían la capacidad económica y financiera necesaria acorde con la facturación emitida y recibida”.

Tras un año de investigación, el juez Kreplak ordenó 17 allanamientos en la ciudad de Buenos Aires, en la provincia de Buenos Aires y en Córdoba. En los procedimientos, que estuvieron a cargo de la Gendarmería Nacional y de personal de ARCA, se secuestraron $199.492.700, US$357.153, 1.090.180 pesos uruguayos, 13.070 euros, 5171 reales y 3100 libras esterlinas, dos vehículos, 16 teléfonos celulares, 15 notebooks, un servidor, dos tablets, 12 dispositivos de almacenamiento, tres armas de fuego y 34 municiones de diferentes calibres.

A la contadora se le imputó “ser miembro de una asociación ilícita destinada a cometer delitos indeterminados, en calidad de jefa y organizadora, que habría funcionado de manera permanente, al menos desde el 2020 a la fecha” y también se le “endilgó su participación en la organización y gestión de un esquema de contribuyentes que funcionan como usinas de facturación apócrifa, con la cual se llevaron adelante los siguientes ilícitos: evasión fiscal agravada, la intermediación financiera no autorizada por más de $40.000.000.000, y lavado de activos.

Según el expediente judicial, Foresio, de 48 años, “emitió comprobantes apócrifos con el fin de generar créditos fiscales en cabeza de los contribuyentes (personas físicas y jurídicas) que gestiona para respaldar la emisión de facturas electrónicas con el fin de no generar saldos a pagar en el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y en el Impuesto a las Ganancias y, a la par, emitió notas de crédito apócrifas, y así burló los mecanismos de detección automática de ARCA, con el propósito de ampliar el rango de crédito fiscal tomado por cada usina a los fines de cubrir las posteriores facturas que esa usina iba a proveer a terceros usuarios”.

La contadora se negó a declarar cuando fue indagada por Kreplak. Ayer, al entender que existen los riesgos procesales de entorpecimiento de la investigación y de fuga, el magistrado rechazó el pedido de arresto domiciliario hecho por la defensa de Foresio.

“Se ha constatado que los imputados utilizaron el dinero obtenido de las maniobras ilícitas, no solo insertándolo en el mercado formal con apariencia de licitud, sino también se obtuvo que han adquirido bienes a título personal”, afirmó el juez Kreplak en la resolución donde procesó a la contadora y a los otros sospechosos.

Según pudo saber LA NACION, Foresio, asesorada por sus nuevos abogados, Alfredo Gascón y Miguel Molina, prepara una ampliación de su declaración indagatoria.

“Mi clienta siempre estuvo apegada a su rol de contadora tanto para la creación de sociedades como para el asesoramiento impositivo. El giro delictivo que le quieran dar otros a su intervención no tiene nada que ver con una participación en las presuntas defraudaciones”, sostuvo Molina.

Y agregó: “Foresio jamás realizó dolosamente facturación apócrifa. No contaba con elementos de detección para conocer los extremos de un intercambio de bienes o servicios de un cliente ni el monto facturado. Para los contadores prima el llamado principio de confianza que rige en la vida en sociedad. Pero si así no lo fuera, tampoco un contador cuenta con las herramientas para desarrollar esa investigación”.

El hijo mayor de la contadora detenida juega en Gimnasia y Esgrima La Plata. Tiene 19 años. Debutó en el primer equipo en julio del año pasado y tiene contrato hasta 2027.

 Se trata de la contadora Natalia Foresio, cuyo hijo es Juan Cortazzo que juega en el club platense  Read More