Es casi imposible entrar en una tienda Hermès y volver a casa con un bolso Birkin nuevo. Pero si lo que quieres es tener en tus manos el bolso Birkin original —el prototipo hecho para la actriz Jane Birkin—, este va a salir a subasta. Se venderá en el marco de la subasta Iconos de la moda de París, que Sotheby’s celebrará el 10 de julio.
El bolso fue expuesto en Sotheby’s de Manhattan del 6 al 10 de junio y luego trasladado a las Galerías Sotheby’s de París —los representantes no han querido decir cómo, por motivos de seguridad—, donde se expondrá del 3 al 9 de julio.
No se ha hecho pública ninguna estimación del precio que podría alcanzar el accesorio.
“En este momento lo vamos a comunicar en privado a los posibles pujadores”, dijo Morgane Halimi, responsable mundial de bolsos y moda de Sotheby’s. “Obviamente se trata de una pieza única, completamente distinta de cualquier otro bolso, o de cualquier otro Birkin. Solemos batir récords con los bolsos Birkin en las subastas. Prevemos que sea tan único como el suéter de Diana o una camiseta usada de la NBA. Tiene valor por lo que es y por lo que ha ocurrido gracias a ese bolso”.
Se trata de la cartera original fabricada en 1984 para Birkin, quien fue un icono del cine francés. La historia de la cartera se ha convertido en una leyenda de la moda. Birkin estaba en un vuelo de Air France a Londres procedente de París y la habían ascendido a primera clase. La cartera cesta que llevaba, su marca personal durante décadas, se encontraba en mal estado. Al subir al avión, su contenido empezó a desparramarse: billetera, llaves, tarjetas de visita, pañales, cigarros y gafas.
Su compañero de asiento resultó ser Jean-Louis Dumas, entonces director ejecutivo de Hermès, la casa de lujo fundada en 1837 por Thierry Hermès. Birkin y Dumas comentaron que ella necesitaba una cartera en la que cupieran todas sus necesidades y empezaron a esbozar una idea en una bolsa para el mareo. Su concepto tenía dos asas, como una cartera tote, y se parecía en cierto modo a una versión reducida del equipaje Haut à Courroies que fabricaba Hermès. La cartera personalizada se convirtió en el prototipo del Birkin, que fue bautizada con el nombre de ella.
El objeto se hizo deseable en parte por su rareza.
“Cada año se crea un número limitado de ellos”, dijo Halimi. “Está la artesanía: puedes repararlo, restaurarlo y apreciarlo. Y además, en un mundo de moda rápida y tendencias estacionales, no va a pasar de moda pronto. Si te ofrecen comprar uno en Hermès, te sientes parte de este pequeño club”.
El Birkin se ha convertido en un elemento clave de la cultura pop desde su creación, su nombre aparece en muchas letras de canciones y como argumento en un episodio de 2001 de Sexo en Nueva York que incluía la memorable frase: “¡No es un bolso, es un Birkin!”.
Este bolso original difiere en varios aspectos de los Birkin disponibles en el mercado. Su tamaño es único, pues tiene una altura de poco menos de 35 centímetros y una profundidad de algo menos de 40 centímetros; su correa no es extraíble; los herrajes son de latón; la cremallera interior es de un fabricante distinto, y las tachuelas de la parte inferior tienen una forma diferente.
Y un detalle más: incluye un cortaúñas que Birkin llevaba colgado en el exterior del bolso. Ella era conocida por no darle demasiada importancia a sus Birkins. Cubría algunos con pegatinas para causas políticas y a menudo les colgaba baratijas.
En las redes sociales, los fans han empezado a publicar sus propios bolsos o teléfonos cargados de dijes, lo que algunos llaman “birkinificar” el accesorio. En el último año, se han difundido en internet imitaciones —u homenajes— del bolso, como el Boatkin.
El Birkin original, sin embargo, ha seguido siendo objeto de intensa fascinación. Se expuso en el Museo de Arte Moderno de Nueva York como parte de la muestra “Items: Is Fashion Modern?” que se celebró de 2017 a 2018, y de nuevo en 2020 en el Victoria and Albert Museum de Londres como parte de la exposición “Bags Inside Out”. Sotheby’s lo expuso en sus galerías de París en octubre de 2024, y en la Sotheby’s Maison de Hong Kong en abril de 2025. Miles de personas acudieron a ver el bolso en las exposiciones de Sotheby ‘s, dijo Halimi.
Birkin, quien falleció en julio de 2023, fue propietaria de cinco bolsos Birkin a lo largo de su vida, uno de los cuales se vendió por unos 160.000 dólares en una subasta de 2021.
Este prototipo, que tiene el valor añadido de ser el original, fue vendido por Birkin en una subasta benéfica por el SIDA en octubre de 1994. Volvió a subastarse en mayo de 2000, en Poulain-Le Fur, y fue adquirido por Catherine Benier, destacada coleccionista y propietaria de la tienda vintage Les 3 Marches de Catherine B en París, por un precio que no fue revelado.
“Adquirir el primer Birkin de Hermès era mi sueño como coleccionista”, escribió Benier en un correo electrónico. Dijo que había leído sobre la subasta de 1994, pero que no participó, y que estaba decidida a ganar la subasta de 2000 cuando se enteró con antelación. “Conseguí el bolso tras una puja encarnizada entre otros pujadores extranjeros y yo… Es la joya de mi colección”.
Benier guardó el bolso, pero la multitud que lo visitó el pasado otoño influyó en su decisión de venderlo. “Una colección solo vale la pena si se comparte”, escribió.
Espera que la subasta bata récords, pero no quiso especificar una cifra deseada.
“Hace 25 años, cuando lo adquirí, ya era el bolso más caro del mundo”, escribió. “Todos estos elementos alimentan la leyenda del primer bolso Birkin, así que sin duda existe un precio, pero ¿cuál es? Este bolso es el objeto de toda una vida, es una leyenda, un icono. ¿Tiene un precio una leyenda? Desde luego”.
Es casi imposible entrar en una tienda Hermès y volver a casa con un bolso Birkin nuevo. Pero si lo que quieres es tener en tus manos el bolso Birkin original —el prototipo hecho para la actriz Jane Birkin—, este va a salir a subasta. Se venderá en el marco de la subasta Iconos de la moda de París, que Sotheby’s celebrará el 10 de julio.
El bolso fue expuesto en Sotheby’s de Manhattan del 6 al 10 de junio y luego trasladado a las Galerías Sotheby’s de París —los representantes no han querido decir cómo, por motivos de seguridad—, donde se expondrá del 3 al 9 de julio.
No se ha hecho pública ninguna estimación del precio que podría alcanzar el accesorio.
“En este momento lo vamos a comunicar en privado a los posibles pujadores”, dijo Morgane Halimi, responsable mundial de bolsos y moda de Sotheby’s. “Obviamente se trata de una pieza única, completamente distinta de cualquier otro bolso, o de cualquier otro Birkin. Solemos batir récords con los bolsos Birkin en las subastas. Prevemos que sea tan único como el suéter de Diana o una camiseta usada de la NBA. Tiene valor por lo que es y por lo que ha ocurrido gracias a ese bolso”.
Se trata de la cartera original fabricada en 1984 para Birkin, quien fue un icono del cine francés. La historia de la cartera se ha convertido en una leyenda de la moda. Birkin estaba en un vuelo de Air France a Londres procedente de París y la habían ascendido a primera clase. La cartera cesta que llevaba, su marca personal durante décadas, se encontraba en mal estado. Al subir al avión, su contenido empezó a desparramarse: billetera, llaves, tarjetas de visita, pañales, cigarros y gafas.
Su compañero de asiento resultó ser Jean-Louis Dumas, entonces director ejecutivo de Hermès, la casa de lujo fundada en 1837 por Thierry Hermès. Birkin y Dumas comentaron que ella necesitaba una cartera en la que cupieran todas sus necesidades y empezaron a esbozar una idea en una bolsa para el mareo. Su concepto tenía dos asas, como una cartera tote, y se parecía en cierto modo a una versión reducida del equipaje Haut à Courroies que fabricaba Hermès. La cartera personalizada se convirtió en el prototipo del Birkin, que fue bautizada con el nombre de ella.
El objeto se hizo deseable en parte por su rareza.
“Cada año se crea un número limitado de ellos”, dijo Halimi. “Está la artesanía: puedes repararlo, restaurarlo y apreciarlo. Y además, en un mundo de moda rápida y tendencias estacionales, no va a pasar de moda pronto. Si te ofrecen comprar uno en Hermès, te sientes parte de este pequeño club”.
El Birkin se ha convertido en un elemento clave de la cultura pop desde su creación, su nombre aparece en muchas letras de canciones y como argumento en un episodio de 2001 de Sexo en Nueva York que incluía la memorable frase: “¡No es un bolso, es un Birkin!”.
Este bolso original difiere en varios aspectos de los Birkin disponibles en el mercado. Su tamaño es único, pues tiene una altura de poco menos de 35 centímetros y una profundidad de algo menos de 40 centímetros; su correa no es extraíble; los herrajes son de latón; la cremallera interior es de un fabricante distinto, y las tachuelas de la parte inferior tienen una forma diferente.
Y un detalle más: incluye un cortaúñas que Birkin llevaba colgado en el exterior del bolso. Ella era conocida por no darle demasiada importancia a sus Birkins. Cubría algunos con pegatinas para causas políticas y a menudo les colgaba baratijas.
En las redes sociales, los fans han empezado a publicar sus propios bolsos o teléfonos cargados de dijes, lo que algunos llaman “birkinificar” el accesorio. En el último año, se han difundido en internet imitaciones —u homenajes— del bolso, como el Boatkin.
El Birkin original, sin embargo, ha seguido siendo objeto de intensa fascinación. Se expuso en el Museo de Arte Moderno de Nueva York como parte de la muestra “Items: Is Fashion Modern?” que se celebró de 2017 a 2018, y de nuevo en 2020 en el Victoria and Albert Museum de Londres como parte de la exposición “Bags Inside Out”. Sotheby’s lo expuso en sus galerías de París en octubre de 2024, y en la Sotheby’s Maison de Hong Kong en abril de 2025. Miles de personas acudieron a ver el bolso en las exposiciones de Sotheby ‘s, dijo Halimi.
Birkin, quien falleció en julio de 2023, fue propietaria de cinco bolsos Birkin a lo largo de su vida, uno de los cuales se vendió por unos 160.000 dólares en una subasta de 2021.
Este prototipo, que tiene el valor añadido de ser el original, fue vendido por Birkin en una subasta benéfica por el SIDA en octubre de 1994. Volvió a subastarse en mayo de 2000, en Poulain-Le Fur, y fue adquirido por Catherine Benier, destacada coleccionista y propietaria de la tienda vintage Les 3 Marches de Catherine B en París, por un precio que no fue revelado.
“Adquirir el primer Birkin de Hermès era mi sueño como coleccionista”, escribió Benier en un correo electrónico. Dijo que había leído sobre la subasta de 1994, pero que no participó, y que estaba decidida a ganar la subasta de 2000 cuando se enteró con antelación. “Conseguí el bolso tras una puja encarnizada entre otros pujadores extranjeros y yo… Es la joya de mi colección”.
Benier guardó el bolso, pero la multitud que lo visitó el pasado otoño influyó en su decisión de venderlo. “Una colección solo vale la pena si se comparte”, escribió.
Espera que la subasta bata récords, pero no quiso especificar una cifra deseada.
“Hace 25 años, cuando lo adquirí, ya era el bolso más caro del mundo”, escribió. “Todos estos elementos alimentan la leyenda del primer bolso Birkin, así que sin duda existe un precio, pero ¿cuál es? Este bolso es el objeto de toda una vida, es una leyenda, un icono. ¿Tiene un precio una leyenda? Desde luego”.
El origen del icónico bolso se remonta a un vuelo en el que la actriz Jane Birkin coincidió con el director ejecutivo de Hermès; juntos esbozaron el diseño original en una bolsa para el mareo Read More