El macabro robo a los restos de Manuel Belgrano que mostró la postergación y el olvido al héroe nacional

Este viernes 20 de junio se conmemora el Día de la Bandera y se recuerda el fallecimiento de Manuel Belgrano, el creador de esta insignia patria y una de las figuras más importantes de la historia nacional y referente de la lucha por la independencia.

Pese a sus convicciones y valentía para defender las ideas independentistas, los últimos meses de su vida estuvieron marcados por un importante deterioro de salud y por la indiferencia de sus contemporáneos.

Como ejemplo de lo que vivió en sus últimos días, Belgrano no recibió ningún tipo de asistencia económica, y solo estuvo rodeado de sus hermanos y amigos y su médico personal. Tras conocerse la noticia de muerte, no recibió un funeral acorde a su figura, aunque un año más tarde sí se le hizo un reconocimiento popular. En uno de los traslados de sus restos, que hoy descansan en la Iglesia Santo Domingo, dos ministros se quedaron con parte de sus piezas dentales, que luego debieron devolver ante las acusaciones públicas.

Los hechos más importantes en la vida de Manuel Belgrano

Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano nació en Buenos Aires el 3 de junio de 1770. Tuvo quince hermanos, entre los que destacaron Francisco, Joaquín y Miguel Belgrano.

El prócer que pasó a la historia como el creador de la bandera nacional tuvo muchas facetas además de este hecho trascendental: fue abogado, militar, pensador y uno de los artífices de la independencia nacional en tiempos en que la Argentina todavía era un territorio dentro del Virreinato del Río de la Plata, que a su vez contenía otros países actuales como Bolivia, Paraguay, Uruguay y parte de Brasil.

Estudió filosofía, teología y latín en el Real Colegio de San Carlos. Luego, viajó a España, donde realizó sus estudios de bachiller en Salamanca, Valladolid, y obtuvo su título de abogado en Madrid en 1792.

En 1794 regresó a Buenos Aires, entonces Virreinato del Río de la Plata, y fue nombrado secretario del Consulado de Buenos Aires.

Si bien no tenía una formación militar, en 1806, fue designado Sargento Mayor del regimiento de Patricios en la defensa de la invasión inglesa.

Además, Belgrano fue una de las figuras más importantes de la Revolución de mayo, acontecimiento fundamental para la independencia del país.

Participó en las batallas de Tucumán, en 1812, y de Salta, en 1813, pero fue derrocado por el ejército español. En 1815 comenzó a participar en el ámbito diplomático y fue enviado a Europa para negociar la independencia argentina.

Al regresar, participó de la Declaración de Independencia de la Argentina, la cual se realizó el 9 de Julio de 1816 en el Congreso de Tucumán. Tras ello, Belgrano participó en la jura de esta declaración, el 21 de julio del mismo año.

Creación de la Bandera Argentina

Fue en Rosario, en 1812, cuando Manuel Belgrano creó la bandera argentina. Con el puesto de Jefe del Ejército del Norte, el 27 de febrero de 1812 alzó por primera vez este emblema de la historia Argentina.

Sus colores estaban inspirados en los de la escarapela, que también fue creada por él mismo, dos semanas antes de este acontecimiento.

Manuel Belgrano murió el 20 de junio de 1820 por una hidropesía, en medio de la pobreza y en momentos en que la región del Río de la Plata estaba convulsionada por enfrentamientos entre distintos sectores locales.

El robo de los dientes de Manuel Belgrano

Al momento de su muerte, Belgrano tenía 50 años y se encontraba postrado por su cuadro de salud, en la misma casa donde nació, sobre la actual Avenida Belgrano al 400.

Fue enterrado en el Convento de Santo Domingo y a su sepelio solo asistieron familiares y amigos. Recién un año más tarde tuvo un funeral cívico, que incluyó una misa y el reconocimiento masivo.

En 1902 se realizó la exhumación de los restos de Belgrano para colocarlos en un nuevo mausoleo y para ello se debía remover la tumba.

Fue en ese procedimiento que los ministros Joaquín V. González y Pablo Ricchieri sustrajeron parte de la dentadura del prócer, lo que quedó documentado por los periodistas que se encontraban allí.

Debido al rechazo público a esta acción, ambos funcionarios tuvieron que devolver rápidamente los dientes del creador de la bandera.

Tras realizarse un informe médico legal, se realizó el reemplazo de la lápida original por una de mayor calidad y se inauguró el mausoleo en 1903, que hoy se puede visitar en la Iglesia de Santo Domingo, en la esquina de Defensa y Avenida Belgrano.

Este viernes 20 de junio se conmemora el Día de la Bandera y se recuerda el fallecimiento de Manuel Belgrano, el creador de esta insignia patria y una de las figuras más importantes de la historia nacional y referente de la lucha por la independencia.

Pese a sus convicciones y valentía para defender las ideas independentistas, los últimos meses de su vida estuvieron marcados por un importante deterioro de salud y por la indiferencia de sus contemporáneos.

Como ejemplo de lo que vivió en sus últimos días, Belgrano no recibió ningún tipo de asistencia económica, y solo estuvo rodeado de sus hermanos y amigos y su médico personal. Tras conocerse la noticia de muerte, no recibió un funeral acorde a su figura, aunque un año más tarde sí se le hizo un reconocimiento popular. En uno de los traslados de sus restos, que hoy descansan en la Iglesia Santo Domingo, dos ministros se quedaron con parte de sus piezas dentales, que luego debieron devolver ante las acusaciones públicas.

Los hechos más importantes en la vida de Manuel Belgrano

Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano nació en Buenos Aires el 3 de junio de 1770. Tuvo quince hermanos, entre los que destacaron Francisco, Joaquín y Miguel Belgrano.

El prócer que pasó a la historia como el creador de la bandera nacional tuvo muchas facetas además de este hecho trascendental: fue abogado, militar, pensador y uno de los artífices de la independencia nacional en tiempos en que la Argentina todavía era un territorio dentro del Virreinato del Río de la Plata, que a su vez contenía otros países actuales como Bolivia, Paraguay, Uruguay y parte de Brasil.

Estudió filosofía, teología y latín en el Real Colegio de San Carlos. Luego, viajó a España, donde realizó sus estudios de bachiller en Salamanca, Valladolid, y obtuvo su título de abogado en Madrid en 1792.

En 1794 regresó a Buenos Aires, entonces Virreinato del Río de la Plata, y fue nombrado secretario del Consulado de Buenos Aires.

Si bien no tenía una formación militar, en 1806, fue designado Sargento Mayor del regimiento de Patricios en la defensa de la invasión inglesa.

Además, Belgrano fue una de las figuras más importantes de la Revolución de mayo, acontecimiento fundamental para la independencia del país.

Participó en las batallas de Tucumán, en 1812, y de Salta, en 1813, pero fue derrocado por el ejército español. En 1815 comenzó a participar en el ámbito diplomático y fue enviado a Europa para negociar la independencia argentina.

Al regresar, participó de la Declaración de Independencia de la Argentina, la cual se realizó el 9 de Julio de 1816 en el Congreso de Tucumán. Tras ello, Belgrano participó en la jura de esta declaración, el 21 de julio del mismo año.

Creación de la Bandera Argentina

Fue en Rosario, en 1812, cuando Manuel Belgrano creó la bandera argentina. Con el puesto de Jefe del Ejército del Norte, el 27 de febrero de 1812 alzó por primera vez este emblema de la historia Argentina.

Sus colores estaban inspirados en los de la escarapela, que también fue creada por él mismo, dos semanas antes de este acontecimiento.

Manuel Belgrano murió el 20 de junio de 1820 por una hidropesía, en medio de la pobreza y en momentos en que la región del Río de la Plata estaba convulsionada por enfrentamientos entre distintos sectores locales.

El robo de los dientes de Manuel Belgrano

Al momento de su muerte, Belgrano tenía 50 años y se encontraba postrado por su cuadro de salud, en la misma casa donde nació, sobre la actual Avenida Belgrano al 400.

Fue enterrado en el Convento de Santo Domingo y a su sepelio solo asistieron familiares y amigos. Recién un año más tarde tuvo un funeral cívico, que incluyó una misa y el reconocimiento masivo.

En 1902 se realizó la exhumación de los restos de Belgrano para colocarlos en un nuevo mausoleo y para ello se debía remover la tumba.

Fue en ese procedimiento que los ministros Joaquín V. González y Pablo Ricchieri sustrajeron parte de la dentadura del prócer, lo que quedó documentado por los periodistas que se encontraban allí.

Debido al rechazo público a esta acción, ambos funcionarios tuvieron que devolver rápidamente los dientes del creador de la bandera.

Tras realizarse un informe médico legal, se realizó el reemplazo de la lápida original por una de mayor calidad y se inauguró el mausoleo en 1903, que hoy se puede visitar en la Iglesia de Santo Domingo, en la esquina de Defensa y Avenida Belgrano.

 Recordado por ser el creador de uno de los mayores símbolos patrios, tuvo una participación clave en la lucha por la independencia nacional, pero sufrió en sus últimos días y hasta intentaron robar sus dientes  Read More