La lancha escolar nos da la pauta de que estamos en un delta que no es el de Tigre. Es de acero y no de madera. Y los chicos entran por adelante, por la ventana, en lugar de por atrás. “Son de la década del 60 y las construyó un alemán, Augusto Widmann”, comenta Nicolás Terzi cuando nos saca al río en Villa Paranacito, Entre Ríos. Arrancamos por el arroyo Sagastume Chico y seguimos por los arroyos La Tinta y Martínez, que desembocan en el río Uruguay, tan ancho y emblemático.
Docente jubilado, Nicolás nos guía por placer. Lo hace con turistas que quieren un rato de río y también con pescadores. En verano, sale en busca del dorado y, en invierno, del pejerrey y del bagre. Siempre en modalidad “catch & reléase”, es decir, pesca con devolución. Su programa arranca en la guardería náutica Los Pinos, que está a unos minutos del centro de Villa Paranacito. Desde Capital Federal se llega después de transitar dos horas por la RN 12 y la RP 46. La salida al río puede ser tanto de mañana como de tarde, y siempre depende de cómo esté el río.
“El hospital y el cementerio quedaron en la isla. Ahí nació el pueblo”, apunta Terzi mientras conduce la lancha por los sectores de río que están próximos al centro de la ciudad. Conocedor de la zona, comparte sus conocimientos sobre la historia de la localidad, la fauna y la flora de este delta entrerriano que es especial por sus múltiples atractivos, que mucha gente no conoce y es tan calmo como especial.
Entonces, una garza mora se posa en una rama que flota entre camalotes que desafían al otoño. El ocre rutilante del ciprés de los pantanos (también llamado ciprés calvo) es una cortina magnética de este entramado de arroyos. Su silueta firme no claudica ante la humedad; sus raíces emergen desafiantes y regalan formas extrañas. Cae la tarde inapelable. Los sauces, las casuarinas y los álamos pasan inadvertidos ante este ciprés surrealista que le suma magia al sur de Entre Ríos.
Datos útiles
Nicolás Terzi. Gran conocedor del delta, guía con pasión por el río y la historia de la localidad. El precio de la salida varía en función de la duración. T: (3446) 61-5168
Los Pinos. Junto al surtidor de combustible, cafetería que ofrece tortas y sándwiches. Abre solo los fines de semana, con horario variable. Conviene chequear. Av. 31 de octubre s/n., Villa Paranacito. T: (3446) 47-8001. IG: @cafedelospinos
La lancha escolar nos da la pauta de que estamos en un delta que no es el de Tigre. Es de acero y no de madera. Y los chicos entran por adelante, por la ventana, en lugar de por atrás. “Son de la década del 60 y las construyó un alemán, Augusto Widmann”, comenta Nicolás Terzi cuando nos saca al río en Villa Paranacito, Entre Ríos. Arrancamos por el arroyo Sagastume Chico y seguimos por los arroyos La Tinta y Martínez, que desembocan en el río Uruguay, tan ancho y emblemático.
Docente jubilado, Nicolás nos guía por placer. Lo hace con turistas que quieren un rato de río y también con pescadores. En verano, sale en busca del dorado y, en invierno, del pejerrey y del bagre. Siempre en modalidad “catch & reléase”, es decir, pesca con devolución. Su programa arranca en la guardería náutica Los Pinos, que está a unos minutos del centro de Villa Paranacito. Desde Capital Federal se llega después de transitar dos horas por la RN 12 y la RP 46. La salida al río puede ser tanto de mañana como de tarde, y siempre depende de cómo esté el río.
“El hospital y el cementerio quedaron en la isla. Ahí nació el pueblo”, apunta Terzi mientras conduce la lancha por los sectores de río que están próximos al centro de la ciudad. Conocedor de la zona, comparte sus conocimientos sobre la historia de la localidad, la fauna y la flora de este delta entrerriano que es especial por sus múltiples atractivos, que mucha gente no conoce y es tan calmo como especial.
Entonces, una garza mora se posa en una rama que flota entre camalotes que desafían al otoño. El ocre rutilante del ciprés de los pantanos (también llamado ciprés calvo) es una cortina magnética de este entramado de arroyos. Su silueta firme no claudica ante la humedad; sus raíces emergen desafiantes y regalan formas extrañas. Cae la tarde inapelable. Los sauces, las casuarinas y los álamos pasan inadvertidos ante este ciprés surrealista que le suma magia al sur de Entre Ríos.
Datos útiles
Nicolás Terzi. Gran conocedor del delta, guía con pasión por el río y la historia de la localidad. El precio de la salida varía en función de la duración. T: (3446) 61-5168
Los Pinos. Junto al surtidor de combustible, cafetería que ofrece tortas y sándwiches. Abre solo los fines de semana, con horario variable. Conviene chequear. Av. 31 de octubre s/n., Villa Paranacito. T: (3446) 47-8001. IG: @cafedelospinos
No es el del Tigre, aunque también combina arroyos, islas y humedales con una gran diversidad biológica. Se puede recorrer en lancha con guía y es un gran spot de pesca con devolución. Read More