El Gobierno preanunció medidas cuyo objetivo es incentivar el uso de dólares en efectivo, comúnmente llamados “del colchón”. En el sector financiero afirmaron que están preparados para un nuevo paradigma de compras en cuotas y en dólares con tarjeta de crédito, pero aún persiste la incertidumbre en sectores como el automotor, supermercados minoristas y mayoristas, y comercios de electrodomésticos.
Una cadena de venta de electrodomésticos líder confirmó que acepta pagos en dólares en efectivo. Sin embargo, la posibilidad de realizar compras en cuotas y con tarjeta de crédito aún no ha sido solicitada por sus clientes, quienes en su mayoría son familias. En caso de que se requiera, afirmaron que evaluarían implementar esa modalidad.
Desde un supermercado minorista con varias sucursales en el Área Metropolitana de Buenos Aires coincidieron con esa postura. En el sector mayorista se identificó una excepción puntual: aunque las ventas en dólares y en cuotas no son frecuentes, en algunos casos se dan gracias a planes específicos facilitados por bancos. Es decir, “casi no existe”, según afirmaron.
Aquí es donde entra en juego qué se puede pagar en dólares, cómo hacerlo y qué no está permitido aún. En ese sentido, Karina Castellano, abogada especialista y directora de Legales del estudio Lisicki, Litvin & Asociados, explicó que los pagos en cuotas fijas en dólares con tarjeta de débito ya están habilitados. El caso de las tarjetas de crédito es diferente.
Esto ayuda a explicar la situación en sectores de ventas más costosas, como el automotor, que todavía no cuentan con la posibilidad de financiar operaciones en dólares.
Los pagos en cuotas fijas con tarjeta de débito están habilitados desde febrero de este año, según precisó Castellano. Este sistema utiliza dólares depositados en cajas de ahorro bancarias y se conoce como “sistema DEBIN”. A través de este mecanismo, comerciante y cliente pueden acordar una determinada cantidad de cuotas fijas en dólares.
Esto implica una transacción entre dos partes, donde el comerciante confía en que el comprador tendrá los dólares necesarios en su cuenta bancaria.
Este esquema representa un punto de partida diferente al uso de los “dólares del colchón”, ya que los fondos están bancarizados. Por eso, el foco de la discusión se centra en el origen de los fondos, más allá del interés comercial en ampliar los medios de pago.
El abogado Hernán Camarero advirtió que muchas personas que compraron dólares blue en el pasado no pueden venderlos en el mercado oficial para afrontar sus gastos. Por su parte, César Litvin señaló que “el gran tema es la justificación de los dólares que se utilizan”.
El ministro de Economía, Luis Caputo, aclaró que “esto no tiene nada que ver con un blanqueo”. Explicó que el objetivo es reducir regulaciones y, eventualmente, enviar un proyecto de ley al Congreso.
Durante un evento de la Cámara de Comercio de Estados Unidos en Argentina (AmCham), Caputo ilustró la situación con un ejemplo: un empresario quiso transferirle $750.000 a su esposa y el banco le pidió justificación. “Eso es culpa nuestra, no es culpa del banco”, afirmó. Modificaciones como esta, dijo, apuntan a “hacerle la vida más sencilla a los argentinos”.
Los bancos consultados por LA NACION confirmaron que están adaptando sus sistemas. Otros actores del sector financiero también mostraron entusiasmo. “Desde Mastercard ya tenemos preparado el flujo de pagos en dólares con tarjetas de crédito para habilitar su uso tan pronto los organismos reguladores lo autoricen. Para que esto funcione, será necesario que todos los actores del ecosistema ajusten sus procesos, tal como ocurrió con los pagos en dólares con tarjeta de débito”, explicaron.
El Gobierno preanunció medidas cuyo objetivo es incentivar el uso de dólares en efectivo, comúnmente llamados “del colchón”. En el sector financiero afirmaron que están preparados para un nuevo paradigma de compras en cuotas y en dólares con tarjeta de crédito, pero aún persiste la incertidumbre en sectores como el automotor, supermercados minoristas y mayoristas, y comercios de electrodomésticos.
Una cadena de venta de electrodomésticos líder confirmó que acepta pagos en dólares en efectivo. Sin embargo, la posibilidad de realizar compras en cuotas y con tarjeta de crédito aún no ha sido solicitada por sus clientes, quienes en su mayoría son familias. En caso de que se requiera, afirmaron que evaluarían implementar esa modalidad.
Desde un supermercado minorista con varias sucursales en el Área Metropolitana de Buenos Aires coincidieron con esa postura. En el sector mayorista se identificó una excepción puntual: aunque las ventas en dólares y en cuotas no son frecuentes, en algunos casos se dan gracias a planes específicos facilitados por bancos. Es decir, “casi no existe”, según afirmaron.
Aquí es donde entra en juego qué se puede pagar en dólares, cómo hacerlo y qué no está permitido aún. En ese sentido, Karina Castellano, abogada especialista y directora de Legales del estudio Lisicki, Litvin & Asociados, explicó que los pagos en cuotas fijas en dólares con tarjeta de débito ya están habilitados. El caso de las tarjetas de crédito es diferente.
Esto ayuda a explicar la situación en sectores de ventas más costosas, como el automotor, que todavía no cuentan con la posibilidad de financiar operaciones en dólares.
Los pagos en cuotas fijas con tarjeta de débito están habilitados desde febrero de este año, según precisó Castellano. Este sistema utiliza dólares depositados en cajas de ahorro bancarias y se conoce como “sistema DEBIN”. A través de este mecanismo, comerciante y cliente pueden acordar una determinada cantidad de cuotas fijas en dólares.
Esto implica una transacción entre dos partes, donde el comerciante confía en que el comprador tendrá los dólares necesarios en su cuenta bancaria.
Este esquema representa un punto de partida diferente al uso de los “dólares del colchón”, ya que los fondos están bancarizados. Por eso, el foco de la discusión se centra en el origen de los fondos, más allá del interés comercial en ampliar los medios de pago.
El abogado Hernán Camarero advirtió que muchas personas que compraron dólares blue en el pasado no pueden venderlos en el mercado oficial para afrontar sus gastos. Por su parte, César Litvin señaló que “el gran tema es la justificación de los dólares que se utilizan”.
El ministro de Economía, Luis Caputo, aclaró que “esto no tiene nada que ver con un blanqueo”. Explicó que el objetivo es reducir regulaciones y, eventualmente, enviar un proyecto de ley al Congreso.
Durante un evento de la Cámara de Comercio de Estados Unidos en Argentina (AmCham), Caputo ilustró la situación con un ejemplo: un empresario quiso transferirle $750.000 a su esposa y el banco le pidió justificación. “Eso es culpa nuestra, no es culpa del banco”, afirmó. Modificaciones como esta, dijo, apuntan a “hacerle la vida más sencilla a los argentinos”.
Los bancos consultados por LA NACION confirmaron que están adaptando sus sistemas. Otros actores del sector financiero también mostraron entusiasmo. “Desde Mastercard ya tenemos preparado el flujo de pagos en dólares con tarjetas de crédito para habilitar su uso tan pronto los organismos reguladores lo autoricen. Para que esto funcione, será necesario que todos los actores del ecosistema ajusten sus procesos, tal como ocurrió con los pagos en dólares con tarjeta de débito”, explicaron.
Las compras en cuotas fijas con débito ya están permitidas, pero todavía faltan regulaciones para habilitarlas con tarjetas de crédito; el origen de los fondos, la gran cuestión Read More