Cómo es el llamativo récord que batió Illinois en el mercado automotriz por la compra de vehículos eléctricos

Durante los primeros tres meses de 2025, el crecimiento en las matriculaciones de vehículos eléctricos en Illinois superó el 50% en comparación con el mismo período del año anterior. Este aumento, que dejó atrás al promedio nacional, encendió las alarmas en el resto de los estados. Los registros estatales muestran un total de 9.821 nuevas unidades registradas entre enero y marzo de este año.

La alta demanda de vehículos eléctricos provocó que los fondos se agotaran en Illinois

Según InsideHook, este incremento en las ventas se debe a que los incentivos estatales y privados generaron una ventana de oportunidad para los compradores. Por un lado, la Agencia de Protección Ambiental de Illinois implementó un sistema de reembolsos, en donde ofreció hasta US$4.000 para la compra de un auto eléctrico y US$1.500 para motocicletas del mismo tipo. Por otro, la compañía de servicios públicos ComEd lanzó beneficios que abarataron los costos de instalación de cargadores eléctricos en tanto en viviendas como en negocios.

Estos estímulos generaron una reacción inmediata en el mercado, que se anticipó al posible recorte de beneficios a nivel nacional y al endurecimiento de los aranceles de importación impuestos por Donald Trump. Según detalla el sitio web de la EPA de Illinois, el volumen de solicitudes para acceder al programa de reembolsos superó rápidamente el presupuesto asignado para el actual año fiscal. Sin embargo, la agencia aclaró que se van a priorizar a los solicitantes con menos ingresos.

Illinois, con poco más de 4.300 puertos disponibles, todavía se encuentra detrás de estados como California, Texas, Florida y Nueva York en relación con la cantidad de estaciones de carga públicas. De todos modos, se posiciona como uno de los territorios que más iniciativas adoptó para la aceleración en la transición hacia los vehículos eléctricos.

Según Electrek, medio especializado en movilidad sustentable, la experiencia en el “Estado de la Pradera” demuestra cómo las políticas de incentivo pueden ayudar a modificar los patrones de consumo. Además, este notable incremento en las matriculaciones también reflejó un cambio en la forma en el que las personas perciben la conveniencia de tener un vehículo eléctrico no solo en términos económicos, sino que también en la conciencia ambiental.

El temor a los aranceles de Trump impulsaron las ventas

La estrategia estatal no solo impactó en los números, sino también en los tiempos. La gran mayoría de los compradores optaron por adelantar su decisión de compra antes de que se vencieran los beneficios federales o se implementaran nuevos impuestos sobre vehículos importados. Esto sugiere que, además de los descuentos directos, la incertidumbre que existe en Estados Unidos en torno a las nuevas regulaciones de los aranceles fue un factor que empujó la curva de ventas.

Durante los primeros tres meses de 2025, el crecimiento en las matriculaciones de vehículos eléctricos en Illinois superó el 50% en comparación con el mismo período del año anterior. Este aumento, que dejó atrás al promedio nacional, encendió las alarmas en el resto de los estados. Los registros estatales muestran un total de 9.821 nuevas unidades registradas entre enero y marzo de este año.

La alta demanda de vehículos eléctricos provocó que los fondos se agotaran en Illinois

Según InsideHook, este incremento en las ventas se debe a que los incentivos estatales y privados generaron una ventana de oportunidad para los compradores. Por un lado, la Agencia de Protección Ambiental de Illinois implementó un sistema de reembolsos, en donde ofreció hasta US$4.000 para la compra de un auto eléctrico y US$1.500 para motocicletas del mismo tipo. Por otro, la compañía de servicios públicos ComEd lanzó beneficios que abarataron los costos de instalación de cargadores eléctricos en tanto en viviendas como en negocios.

Estos estímulos generaron una reacción inmediata en el mercado, que se anticipó al posible recorte de beneficios a nivel nacional y al endurecimiento de los aranceles de importación impuestos por Donald Trump. Según detalla el sitio web de la EPA de Illinois, el volumen de solicitudes para acceder al programa de reembolsos superó rápidamente el presupuesto asignado para el actual año fiscal. Sin embargo, la agencia aclaró que se van a priorizar a los solicitantes con menos ingresos.

Illinois, con poco más de 4.300 puertos disponibles, todavía se encuentra detrás de estados como California, Texas, Florida y Nueva York en relación con la cantidad de estaciones de carga públicas. De todos modos, se posiciona como uno de los territorios que más iniciativas adoptó para la aceleración en la transición hacia los vehículos eléctricos.

Según Electrek, medio especializado en movilidad sustentable, la experiencia en el “Estado de la Pradera” demuestra cómo las políticas de incentivo pueden ayudar a modificar los patrones de consumo. Además, este notable incremento en las matriculaciones también reflejó un cambio en la forma en el que las personas perciben la conveniencia de tener un vehículo eléctrico no solo en términos económicos, sino que también en la conciencia ambiental.

El temor a los aranceles de Trump impulsaron las ventas

La estrategia estatal no solo impactó en los números, sino también en los tiempos. La gran mayoría de los compradores optaron por adelantar su decisión de compra antes de que se vencieran los beneficios federales o se implementaran nuevos impuestos sobre vehículos importados. Esto sugiere que, además de los descuentos directos, la incertidumbre que existe en Estados Unidos en torno a las nuevas regulaciones de los aranceles fue un factor que empujó la curva de ventas.

 Las políticas estatales, junto a otros factores vinculados con el gobierno general, generaron un escenario ideal para adquirir un vehículo eléctrico en el “Estado de la Pradera”  Read More